Varios destacados senadores demócratas y la principal asociación gremial de Estados Unidos expresaron su apoyo a los aranceles al acero y aluminio anunciados por el Presidente Donald Trump para proteger la industria y los trabajos estadounidenses.
«Esta acción bienvenida debía haber sido adoptada hace tiempo para las factorías siderúrgicas de Ohio y los trabajadores que viven con el temor de ser las siguiente víctimas de las trampas chinas», dijo Sherrod Brown, senador demócrata, al valorar la medida.
De igual modo se expresó el también senador demócrata Ron Wyden, quien mostró su satisfacción de que el Presidente estadounidense reconozca la importancia de encarar estos desafíos y finalmente actuar, según dijo.
«La industria siderúrgica estadounidense ha estado bajo presión durante décadas por los productos injustamente comercializados por China y otros lugares, así como por el exceso de producción global», agregó Wyden, quien representa a Oregón.
Por su parte, Bob Casey, senador demócrata por Pensilvania, felicitó a Trump por anunciar su intención de actuar para proteger a los trabajadores estadounidenses de países como China, que, aseguró, hacen trampas en el comercio.
Asimismo, desde la principal agrupación sindical estadounidense, la AFL-CIO, se aplaudió la decisión de Trump.
«Estas tarifas son pasos positivos para responder a las prácticas depredadoras que dañan a los trabajadores y compañías que producen en Estados Unidos», aseveró Richard Trumka, presidente de la AFL-CIO.
Trumka destacó la labor del Secretario de Comercio, Wilbur Ross, y el representante de Comercio Exterior, Rob Lighthizer, para impulsar estas acciones correctas pese a que, dijo, el ala de Wall Street en el Gobierno se opone a ellas.
Trump anunció este jueves que firmará la próxima semana aranceles del 25 por ciento a las importaciones de acero y del 10 por ciento a las de aluminio de algunos países, y que estarán en vigor por un largo período.
La decisión de Trump, quien aún no identificó los países afectados, se produjo pese a la oposición de parte de sus asesores económicos más cercanos, entre ellos Gary Cohn, director del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, quien advirtió sobre los riesgos que implica ante la posibilidad de que se desencadene una guerra comercial.
En enero, el Mandatario estadounidense ya había ordenado imponer restricciones a las importaciones de lavadoras y paneles solares, pero las medidas anunciadas contra el acero y aluminio, de acuerdo a los analistas, son de mucho mayor impacto por el volumen de negocio que generan estos sectores.