Es por gente convenenciera, cómo Gaspar Ventura Cisneros, que el PRI en Umán ni pinta, ni da color.
La Jitomata se juntó con la Perejila, para presentarnos una receta cuyo principal ingrediente es el chile pasilla.
Por: Marijose Canul
Umán, Yuc. a 29 de diciembre de 2018.- El acta de la sesión ordinaria de cabildo de la noche de ayer verdaderamente parece un mal chiste del Día de los Santos Inocentes, pero el nombramiento de Gaspar Ventura Cisneros, como director general del DIF municipal, sólo muestra una cosa: la grotesca verdad en cuanto a la actitud y supuesta fidelidad de algunos priistas hacia su partido.
Y es que, tal parece que algunos que se ostentaban como priistas de hueso colorado han demostrado lo farsantes que pueden ser y sin escrúpulo alguno se venden al mejor postor. A Gaspar Ventura, “Venturita”, al Jaime Durán y a los regidores priistas solo les hace falta una cosa: ir a pararse, por las noches, allá por el rumbo del Monte de Piedad, en el centro de Mérida. Así han prostituido la política… una política de la que, hasta hace poco, presumían que era para servir al pueblo.
Pero para “Venturita” tal parece que vivir fuera del erario es imposible, no sabe hacer nada más. Mamar del erario para él es indispensable pues no sabe vivir de otra cosa y el hambre es canija. Atrás quedaron las imágenes de campaña con Sahuí, con “Quique” Castillo… pues ahí ya no hubo hueso. ¿Qué pactaron “Venturita” y Freddy a cambio? Sólo ellos dos lo saben, pero de que pactaron, pactaron. Sólo alguien muy pendejo creería el cuento que Ruz Guzmán le ofreció la chamba a Gaspar sólo de “buena onda”. Freddy nunca hace nada gratis y siempre procura sacar ventaja personal de todo, así que, por lógica y sentido común, “Venturita” vendió algo a cambio de ser director general de DIF.
La falta de liderazgo priista en Umán es lo que ha generado que Freddy Ruz se comporte con total descaro y quebrante la Ley a placer, pues siempre hay gente dispuesta a pactar utilizando la impunidad a favor de Ruz Guzmán como moneda de cambio… por eso Umán está cómo está.
Fuente: Tu Espacio del Sureste
