Por César Martínez
Para Daniel García, una de las personas que han estado más de 17 años y 5 meses en la cárcel sin recibir una condena, la prisión preventiva en México es una barbaridad.
García, junto con Reyes Alpízar, están a punto de recuperar su libertad, luego de que el Ministerio Público del Estado de México se desistiera ante el juez Felipe Landeros Herrera de dicha medida cautelar.
«El uso de prisión preventiva es una barbaridad, es una imposición prehistórica, no ocurre en el mundo moderno», comentó, en entrevista telefónica desde el penal Barrientos, en Tlalnepantla.
«El hecho de México es una atrocidad. Los ministros de la Corte han generado la continuidad de esta infamia. Nadie puede ser castigado sin antes habérsele acreditado la comisión de un delito», reflexionó.
El juez Felipe Landeros determinó que no es necesario que ambos estén en prisión preventiva, por lo que ordenó que sigan su proceso fuera de la prisión, con un brazalete de geolocalización.
«No tenemos ánimos de venganza, sí tenemos interés de que esto no quede impune en cuanto a las reparaciones», agregó García en la entrevista.
Pese a todo, consideró que es responsabilidad de ambos demostrar que las medidas alternativas son viables, al regresar cada 15 días a firmar ante la fiscalía.
«Si se nos demuestra que somos culpables y si tenemos que regresar a prisión, esa será la consecuencia, pero si no, en ese momento en que se nos dicte la sentencia absolutoria exigiremos la reparación del daño y que tengamos la disculpa del Estado mexicano», adelantó.
