La inflación llegó a 4.01 por ciento en septiembre, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), impulsada principalmente por el precio de mercancías, frutas y verduras y contrarrestada por la caída en el precio de los energéticos.
Si bien desaceleró respecto a 4.05 por ciento registrado en agosto, es el segundo mes consecutivo en que la inflación se ubica por arriba del objetivo del Banco de México (3 +/- 1 ). De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional esto sería resultado de “factores transitorios”.
Pese a la caída anual de 0.39 por ciento en el precio de los energéticos, la inflación no subyacente –que agrupa insumos propensos a variar– aumentó 4.10 por ciento. Esto se debió en particular al aumento de 12.76 por ciento en las frutas y verduras, de 4.49 por ciento en derivados de los animales y de 4.47 por ciento en las tarifas autorizadas por el gobierno.
De hecho fueron la cebolla, el pollo y el limón los productos que más incidieron en la inflación de septiembre. La primera aumentó 39.91 por ciento, mientras los mayores precios a la baja fueron el jitomate, el huevo y los servicios profesionales.