La realidad está muy complicada para todos, debemos admitir que se han relajado demasiado todas las medidas sanitarias de prevención y de seguridad, y están en riesgo muchos de los negocios que luchan por subsistir y tratan de defender los empleos, “la cosa viene fea”, advirtió ayer Michel Francis Salum, presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Mérida (Canacome).
“La salud está primero, los contagios y muertes siguen aumentando de manera alarmante, ante eso nadie se puede oponer”, afirmó.
De acuerdo con el dirigente empresarial, “esto genera un grave riesgo de que se presente un descalabro a la economía, a los empleos, muchos negocios se aniquilarán, es una situación muy difícil la que hoy vivimos”.
Por la tarde-noche Salum Francis recordó que el sector terciario, el comercio, es de los más golpeados con esta contingencia, muchos negocios incluso todavía no pueden abrir, están en espera de la siguiente ola para hacerlo y llevan ya más de cuatro meses cerrados.
Empero, con el aumento de contagios y muertes por coronavirus ya es algo que se ve muy lejos que vuelvan a abrir, remarcó.
A diferencia de ocasiones anteriores, el empresario dijo que esta vez sí les consultaron, el gobierno no solo les planteó la situación y las nuevas disposiciones que estaban por aplicar, antes de ser anunciadas el pasado martes. Hasta trabajaron con ellos especialistas en estadísticas y números del sector privado, y se encontró que era necesario aplicar estas nuevas medidas.
Complicada realidad
“El gobierno pudo irse ya al rojo en el semáforo epidemiológico, pero se buscó la manera de frenarlo, estamos ante una realidad muy complicada para todos, y todos deberíamos tomar conciencia de la situación, todos en general”, comentó.
El líder de la Canacome consideró como algo innegable que se han disparado los contagios, y “la verdad oponerse a algo que se sale de control sería irracional, hay que procurar que la gente se cuide para que los casos bajen, que se les atienda en tiempo y forma, porque también es verdad que muchos llegan al hospital ya con un pie en el cementerio”.
Entre los planteamientos que les hizo el gobierno del Estado, Salum Francis señaló que se observa una velocidad de los contagios que está por encima de lo pronosticado, la capacidad de camas disminuyeron y las de los hospitales federales no se liberaron más para atender a pacientes del Covid-19, “la cosa viene fea”.
“Nos queda muy claro que la situación está muy complicada, la gente se relajó mucho al grado de empezar con fiestas y convivencias no solo en la playa, sino en espacios públicos de los municipios, en todos lados, y este es el resultado”, afirmó.