En febrero, la inflación se ubicó en 0.38 por ciento con respecto al mes anterior, mientras que a tasa anual registró una variación de 5.34 por ciento, la más baja desde febrero de 2017, cuando alcanzó 4.86 por ciento.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), la variación mensual del componente no subyacente obtuvo su resultado más bajo desde febrero del año pasado y alcanzó 0.08 por ciento por el efecto del sector agropecuario que bajó 1.90 por ciento, la variación negativa más amplia desde febrero de 2013.
Sin embargo, la inflación subyacente, que excluye a los agropecuarios, energéticos y tarifas autorizadas por distintos órdenes de Gobierno, resultó en la variación mensual más alta desde marzo del año anterior, al ubicarse en 0.49 por ciento, impulsada por el componente de servicio, que creció en 0.45 por ciento, mientras que en enero solo fue de 0.04 por ciento.
Por objeto de gasto, la inflación para febrero se ubicó en 1 por ciento para la ropa, calzado y accesorios, y para el sector transporte 2.08 por ciento.
Por el contrario, los alimentos, bebidas y tabaco bajaron en 0.41 por ciento, y la vivienda en 0.09 por ciento.
El índice general de precios al consumidor para febrero se ubicó en 132 puntos.
La inflación para la segunda quincena de febrero fue de 0.04 por ciento.
Para el mismo lapso, el componente no subyacente decreció 0.22 por ciento, su segunda baja quincenal consecutiva.
