Desde que la Secretaría de Movilidad (Semovi) tomó el control de los parquímetros, los recursos que se recaudan por las alcancías en la vía pública están en total opacidad.
Con el arranque del programa Ecoparq, se estableció que los ingresos serían públicos para que los vecinos supieran cuánto ingresaba en cada uno de los 13 polígonos y cuánto les correspondía para mejoras urbanas.
Así fue hasta marzo de 2017, cuando oficialmente la Autoridad del Espacio Público (AEP) dejó el control de los parquímetros a la Semovi, tras la reforma en la Ley de Movilidad de octubre de 2016.
Desde junio, la página en internet con la información dejó de actualizarse y tampoco se rindieron reportes a los comités ciudadanos.
«Es un desastre. Semovi no rinde cuentas, no saben. Desgraciadamente les cayó de bote pronto y no tienen ni idea», lamentó Lucero Rincón, del Comité Ciudadano Roma Norte 1.
«Yo hice una obra muy chica en (las calles) de Sonora y Durango, y ya tenía un acumulado bastante grande para hacer otra obra y ahorita no sé cuánto tengo, nadie sabe».
El corte más reciente que se tiene de ingresos de parquímetros es a junio de 2017, donde se especificaban ingresos por 179.2 millones de pesos, de los cuales estaban disponibles 53.7 millones para mejoras vecinales como contraprestación.
Alejandro Curiel, del Comité Ciudadano de Anzures, refirió que la opacidad no sólo es de los recursos obtenidos en el último año, sino que se ignora monto y destino del acumulado de tiempo atrás.
«La realidad es que no sabemos dónde está el dinero», reprochó.
Isidro López, del comité ciudadano de Hipódromo 1 aseguró que la falta de claridad frena la planeación de proyectos próximos.
«A través de esos recursos es que nosotros vamos a presentar nuestros proyectos. Nuestro principal problema es la transparencia de saber de manera muy clara qué recursos se han generado por colonia y por polígono», expuso.
Ante su insistencia, informó el vecino, la Semovi le entregó en media hoja una cifra de lo recaudado en su colonia, pero sin ningún detalle ni formalidad.